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En 1996 la Universidad Austral de Chile instauró el Premio Jorge Millas para reconocer a quienes hayan contribuido de manera notable con su obra intelectual y su vida a ennoblecer y desarrollar la institución universitaria o la educación superior. En esta oportunidad se destacó la labor del Dr. Francisco Javier Gil Llambias.

El académico de la Universidad de Santiago de Chile se ha dedicado a impulsar iniciativas de acceso inclusivo a la educación superior como por ejemplo, la Bonificación del 5% Becas de Excelencia Académica (1992), Propedéuticos UNESCO (2007), Ranking de notas (2010), Programa de Acceso Efectivo a la Educación Superior (PACE) (2014), y Ranking 850 (2015).

Laudatio

El Vicerrector Académico, Dr. Néstor Tadich, presentó la defensa de méritos del galardonado. En sus palabras destacó, además de los notables aportes al acceso inclusivo de los estudiantes a la educación superior, su importante labor presidiendo Comisión de Reconciliación de la USACh, la cual investigó los atropellos a los derechos humanos dentro de dicha Universidad, durante la Dictadura.

El Dr. Tadich comentó que el Dr. Francisco Javier Gil “ha necesitado perseverancia y tenacidad para colisionar una y otra vez contra la burocracia y los antiguos paradigmas sectarios y excluyentes, para finalmente ir convenciendo, haciendo que el sectarismo se vaya rompiendo para dejar entrar, primero a algunos, y luego a un número mayor de estudiantes talentosos, pero socioeconómicamente vulnerables y de esta forma poder lograr en un futuro, ojalá no muy lejano, muchos de ellos logren cambiar sus destinos, rompiendo la estratificación perversa en que nuestra sociedad los obliga a estar en la actualidad”.

Reconocimiento

Posteriormente, el Rector de la UACh, Dr. Óscar Galindo hizo entrega al Dr. Francisco Javier Gil de la medalla Jorge Millas y un diploma en madera.

Luego, el galardonado expuso la charla "Ennoblecer el Acceso a la Educación Superior Universitaria, una Tarea de Todos", en la cual recalcó que lo que sustenta el trabajo que realiza es la idea que los talentos están repartidos de igual forma en todas las personas, independiente del nivel socioeconómico de donde provenga.

Sus investigaciones y todo lo desarrollado por el Dr. Gil y su equipo, dan cuenta que el mejor predictor para el rendimiento académico de los estudiantes en la universidad es el compromiso que ese joven tuvo en su colegio. “Los estudiantes que se destacan académicamente en sus colegios, por ejemplo los ranking 850, son quienes tienen mejor rendimiento académico en la universidad, incluso mejor que quienes sacan excelentes puntajes en la PSU”.

Fuente: Noticias UACh