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Certificación formación de líderes secundarios 2014-2015
El viernes 30 de octubre cerca de 60 jóvenes de disitntos colegios católicos de Santiago terminaron su proceso de formación de liderazgo cristiano que comenzó en novimebre del 2014 en la encuentro realizado en Picarquín. Un proceso que continuó este año con jornadas de profundización y el desarrollo de proyectos sociales con los cuales los jóvenes buscaron impactar positivamente en sus comunidades educativas.
Un importante rol tuvieron los profesores a cargo de acompañar como agentes pastorales a los jóvenes en todas las faces de este proceso.
Esta iniciativa se replica todos los años y se suma a las distintas instancias de encuentro y formación que la Vicaría propicia para que los colegios católicos puedan hacer de la pastoral una experiencia central de su gestión educativa.
A través de una metodología participativa, busca incentivar una actitud proactiva y de servicio a los demás, profundizando en el conocimiento de los propios talentos y el desarrollo de una conciencia social que les permita reconocer el entorno como tierra sagrada, descubriendo en los rostros e historias de tantos y tantas, la posibilidad de caminar juntos en la búsqueda del bien común.
Los convocados son alumnos de los niveles mencionados, que han mostrado en sus colegios, algún grado de liderazgo, en la pastoral, en los centros de alumnos, directivas de curso o cualquier otra iniciativa escolar.
La primera experiencia en la escuela, comienza con un campamento de dos días durante el mes de diciembre; al año siguiente se realizan cuatro jornadas de seguimiento, proceso de profundización de los objetivos propuestos.
En el proceso de formación de liderazgo se interesa principalmente que los estudiantes puedan encontrarse con la persona de Jesús desde lo más profundo de su ser, quien es fuerza y motor de transformación personal y social.
La experiencia de formación de los estudiantes en la escuela, culmina con la formulación, implementación y puesta en marcha de proyectos sociales, por colegio.
La cumbre del proceso llega con la ejecución del proyecto ante el equipo de Pastoral Escolar, que está a cargo de la experiencia. Los jóvenes deben invitar a este equipo, a presenciar alguna de las experiencias relevantes de su proyecto, dejando evidencia de su implementación.
Finalizado el proyecto, los estudiantes están en condiciones de recibir la certificación que avala su formación en liderazgo cristiano. En el marco de una significativa ceremonia, los jóvenes, en presencia de representantes de su propio colegio y familia, reciben el preciado diploma que confirma sus aprendizajes.
A juicio de los participantes, los mayores logros de su paso por la escuela, se refieren al conocimiento obtenido sobre ellos mismos, al descubrir talentos y capacidades que no conocían, y poner a prueba sus recursos internos, para realizar las tareas encomendadas.
