El jueves 15 se clausuró la Escuela de Invierno que la Vicaría de la Educación prepara cada año para los educadores católicos. Este año fueron pocos los valientes que enfrentaron el frío capitalino para prepararse en su tarea de educadores, en las distintas temáticas ofrecidas. La falta de más participantes contribuyó a que se lograra un ambiente familiar en cada curso y que para beneficio de los asistentes se avanzara más rápido y quedara tiempo para la reflexión y el compartir, sobre todo de experiencias significativas. La escuela concluyó con una Eucaristía presidida por el padre Juan Francisco, nuestro Vicario.