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El 17 de marzo, un grupo de 120 alumnos de educación media, con profesores y religiosas, salieron a visitar el sector de la Parroquia Tránsito de San José, para ofrecer compañía, consuelo y escucha a las familias que allí viven.

“Para nosotros fue un orgullo poder entregar sencillas cosas, palabras de fe y esperanza en esos momentos de tristeza y tremenda necesidad.  Como discípulos misioneros queremos dar gracias a Dios, por la capacidad de amar que nos da, como también a nuestro colegio, por la oportunidad de experimentar lo que realmente significa misionar. Antes de partir, oramos por las personas que visitaríamos, por su tranquilidad, por la unidad de la familia y dimos gracias por la vida, orar juntos por ellos y acompañarlos, fue una experiencia inolvidable. Todos salimos fortalecidos en nuestros deseos de apoyar a la gente, con lo que podamos entregar, con una sonrisa, una palabra, con nuestro tiempo, ya que descubrimos que vale la pena. Las personas necesitan una palabra de aliento para reconstruir nuestro país.”

Katherine Lazo, Alumna de cuarto año medio