Fueron distintos los lugares que se visitaron durante el día y también en la tarde y la noche del sábado; hospederías, hogares de niños y comedores parroquiales donde la alegría y fraternidad fueron parte del encuentro.
Alexis Rodríguez, del equipo coordinador de Navidad en la Calle, destacó que este año la actividad fue de total presencialidad, lo que posibilitó un encuentro más cercano. "Pudimos tener nuevamente una cena para compartir, todos sentados en una misma mesa, orar junto con las personas, eso fue una ganancia". Además este año aumentaron los lugares que se acompañó, "estamos llegando a más de mil beneficiarios y también contamos con más voluntarios con más de cien personas que se sumaron a esta iniciativa".
Daniel Bernales, fue por primera vez voluntario de Navidad en la Calle, y estuvo compartiendo en el comedor de la parroquia San Juan Evangelista, en el centro de Santiago. Los comensales comenzaron a llegar a eso de las 13 horas para disfrutar de un almuerzo navideño muy especial preparado por los voluntarios. "Me motivó participar pensar y ponerme en el lugar de las personas y agradecer a Dios por mi familia, por tener apoyo incondicional de ellos, tengo salud y quizás otras personas no tienen eso. Quería dar una compañía a las personas, y ha sido increíble esta oportunidad", comentó.
Otra voluntaria fue Jeanette Santander participa de Navidad en la Calle desde hace 6 años y una vez más quizo ser parte de esta gran jornada solidaria. "Me gusta colaborar, ayudar y ahora en Navidad me gusta compartir con personas que no va a tener la oportunidad de tener compañía, algunas personas están viviendo en la calle, otras están pasando un momento de dificultad en este tiempo, hay muchas necesidades. Me voy con el corazón lleno".
Navidad en la Calle es una iniciativa de la Vicaría para la Educación, con más de treinta años. Es organizada por el equipo de Pastoral Educativa de la Vicaría, invitando a voluntarios y voluntarias a vivir una Navidad distinta y solidaria junto a quienes más lo necesitan.