Si cambian los estudiantes también cambia la didáctica

El día miércoles 18 de octubre se reunieron los profesores de religión de la zona oriente en la misma Vicaría Zonal para su último encuentro del año 2017. En esta ocasión, los profesores compartieron la síntesis elaborada en el mes de agosto (ver síntesis) de la visión que tienen sobre los jóvenes que conocen. Luego se trabajó a continuación la correspondencia entre la síntesis con el Marco para la Buena Enseñanza en el dominio A, preparación para la enseñanza, de tal forma de poder concluir algunas pistas didácticas para el aula.

En la primera parte del encuentro se leyó el informe que sintetizó la visión sobre los jóvenes destacando algunos conceptos que invitaron al diálogo entre los profesores. Se hizo una observación respecto de las creencias que manifiestan los jóvenes que sugiere cierta confusión. Al parecer, expresaron algunos participantes, los estudiantes dicen creer en Dios, pero sin una identificación clara con la institución.

Para los presentes la creencia en Dios está arraigada en la tradición y en la consecuencia con la institución, en este caso católica, pero surgió la pregunta acerca de la necesidad de pertenecer a una iglesia en particular. Desde un punto de vista de ciertas encuestas sí podría decirse que en la actualidad hay una crisis en las instituciones más que en la creencia religiosa. Pero la crisis de las instituciones es más global, no sería correcto pensar que sólo las iglesias las viven. Respecto de algunas prácticas que llamó la atención a los profesores, también se cuestionó si esto representa una novedad ya que al parecer siempre ha habido en nuestro país una creencia en lo mágico, en los juegos adivinatorios o en la asociación de una práctica ritual con la buena suerte.

Se compartieron diferentes ejemplos en los cuales los profesores intentan hacer comprender la importancia de las creencias, sin tampoco rechazar las de los estudiantes, dado que además, deben hacer clases a católicos y evangélicos en la misma sala. Pero al presentar las creencias de los católicos deben hacerlo con argumentación muy clara. En este aspecto, los participantes también se preguntaron acerca de la forma en que el mensaje eclesial es entregado que pudiera ser percibido como muy condenatorio o prohibitivo. Al respecto, observan que el Papa Francisco ha traído una forma más cercana para presentar el contenido.

A continuación, se revisó el Dominio “preparación de la enseñanza” del MBE que usa descriptores como “conocer las características del desarrollo de los estudiantes”, sus “particularidades familiares y culturales”, así como sus “fortalezas y debilidades respecto de los contenidos que enseña” y sus “diferentes maneras de aprender”.

Los elementos del contexto expuestos en la síntesis sirvieron de insumo para revisar las formas en las cuales los profesores de religión utilizan esta información para pensar la didáctica de la clase.

Los profesores señalaron que en la vida diaria en las aulas observan que no necesariamente los cursos de un mismo nivel aprenden de la misma manera. Entonces, un aspecto a considerar, además de las características psicológicas, son las formas particulares en que algunos cursos responden mejor a la propuesta del docente.

Los profesores se dieron cuenta que el contexto actual es diferente del que ellos conocieron cuando estaban en la escuela. A veces no logran captar que ellos mismos han ido cambiando. Tienen la impresión que siguen haciendo lo mismo, pero en realidad ocurre que no han tenido tiempo para compartir con otros sus estrategias.

En este diálogo se relevó también el uso del lenguaje con los migrantes quienes poseen significados y giros distintos en el vocabulario. Estos elementos culturales hacen pensar que en el plano de la didáctica los profesores buscan estrategias que les permitan apuntar a la formación espiritual, compartir el sentido de la existencia y profundizar la fe católica, así como preparar a los estudiantes para la recepción del Evangelio.