Reconociendo fortalezas personales para ser tutores de resiliencia

El miércoles 23 de septiembre, se realizó el II° encuentro de profesores de religión de la zona del Maipo en el Colegio Compañía de María de Puente Alto, ante la asistencia de 36 docentes.

Soledad Larrraín compartió con los docentes características que convierten a un profesor o a cualquiera persona en tutor de resiliencia. A través de la lectura de un documento, los profesores fueron comentando preguntas o aportes para comprender cómo desde el rol docente se pueden convertir en tutores de resiliencia.

Primero que todo hay que reconocer que los tutores ofrecen apoyo y sostén a alquien que necesita superar una situación de dolor. Anima al otro en el proceso de superación, estimulando la confianza y favoreciendo el vínculo. Para ello, lo primero es reconocer al otro tal cual es, no como el problema que padece. Para ello, se recomienda saber los intereses y habilidades del otro para hacerlo crecer. Fijarse en los defectos es siempre paralizante.

Los profesores reconocen muchas situaciones de dolor que les pasan a sus estudiantes, así como también ellos sufren sus propias inseguridades y debilidades. El sistema laboral, agobiante, por ejemplo, también los afecta. Ante estas situaciones, los docentes pueden aprovechar para empatizar mejor con sus estudiantes. La empatía puede ayudar para crecer juntos.

Luego de compartir algunas situaciones que viven los estudiantes y cómo los profesores las enfrentan, reconocieron fortalezas personales y habilidades que los hacen ser personas capaces de ser tutores de resiliencia. En este espíritu positivo concluyó el encuentro, agradeciendo por los dones recibidos, al mismo tiempo, invitando a hacer comunidades de aprendizaje para sentir acompañados.