Profesores de religión de la zona norte trabajan constituyéndose en comunidad de aprendizaje

El jueves 16 de abril, los profesores de religión de la zona norte se reunieron para trabajar el primer tema del año sobre “el rol docente en la planificación y la evaluación de aprendizajes”.

Este encuentro se enmarcó en el trabajo que realiza el Área de Pedagogía en Religión de la Vicaría para la Educación de conformar comunidades de aprendizaje que apunten al desarrollo profesional docente.

El tema propuesto despertó una alta participación de los profesores que, a partir de un texto de una experiencia docente, descubrieron problemáticas como las siguientes:

1. El profesor no tiene claridad que en religión se necesita planificar y evaluar aprendizajes.
2. La existencia de agobio laboral frente a la demanda de las autoridades para cumplir este trámite.
3. Falta de socialización del docente para compartir con otros sus dificultades.
4. Falta de claridad del docente para comprender que el manejo de contenidos en básica no es igual que en media, puesto que se requerirán estrategias diferentes.
5. El profesor no conoce el libro de religión del nivel por lo que no puede planificar adecuadamente.
6. Las peticiones de UTP hacia el docente se realizan en el pasillo.
7. Dificultad de hacer coincidir instrumentos curriculares como la EREC, el texto de estudio y el aprendizaje de los niños.
8. La demanda de UTP de diversificar los instrumentos de evaluación.
9. El profesor no tiene claro cómo evaluar en su asignatura.
10. Falta de claridad del docente que la evaluación no es para poner notas sino que para los aprendizajes.
11. El profesor no planifica en la situación presentada, pero sí evalúa.
12. Existencia de un esquema rígido para problemáticas diferentes: por ejemplo, las planificaciones y evaluaciones pueden estar apuntando a procesos o información concreta. En religión, lo fundamental es generar procesos.

La metodología de trabajo dio lugar a la exploración de experiencias profesionales para indagar sus propias problemáticas. Los profesores pudieron dialogar y analizar por qué ocurren situaciones como las siguientes: “fui a hacer un reemplazo a un colegio mientras era estudiante de pedagogía, pero solo tenía cursos teológicos y nunca había planificado”; “tengo que planificar en mi casa porque el colegio solo me da una hora y tengo 19 cursos que atender, además el material lo imprimo en mi casa, porque no hay recursos en el colegio”; “el marco de la EREC no se ajusta con el tipo de niños que tengo en la clase, entonces no sé qué hacer con la planificación” o “siguiendo la planificación diaria en un curso, sus inquietudes apuntan en otra dirección debiendo olvidar lo pensado para abocarme a sus preguntas”.

El alto nivel de compromiso y participación con la actividad se ajusta con el deseo de que estos encuentros potencien la capacidad reflexiva del docente, adquiriendo nuevos saberes que se puedan incorporar a su desarrollo profesional. Así mismo, el encuentro permitió generar un espacio muy propicio para crecer comunitariamente en la vida cristiana y profesional de los docentes.

Se dejó material para que puedan consultar en nuestra biblioteca y se plantearon los siguientes encuentros.