El papel de las mociones

El día martes 23 de mayo se realizó el segundo encuentro de profesores de religión de la Zona Centro de Santiago. En esta oportunidad, con los asistentes nos propusimos realizar una exploración de nuestra cotidianidad pedagógica para intentar hacer una lectura religiosa de la realidad. Para ello hemos seguido los siguientes pasos:

Recordar algún episodio reciente que nos haya producido alguna inquietud o preocupación en el ámbito de la sala de clases.

Tratar de que los recuerdos sean lo más fieles a la vivencia con las frases dichas por los protagonistas, las emociones y acciones ocurridas.

Plasmar lo anterior en un texto que sería compartido por todos los asistentes. El texto debía ser escrito bajo la forma de un relato con acontecimientos y protagonistas, con un inicio, un desarrollo y un cierre, aunque esto no sea posible por el tiempo.

Con estas indicaciones los profesores se abocaron a redactar sus relatos.

La escritura se transformó en un desafío puesto que, al parecer, no tenemos el hábito de hacerlo y al mismo tiempo el proceso de redacción exige un cierto rigor. Quizás por esto la transmisión oral sigue siendo la forma más usada para dar a conocer lo que nos acontece. Uno de los docentes presente en la sesión señaló que la escritura no era su fuerte, por lo tanto, relató su historia agregando espontáneamente datos para completarla. Esta modalidad tiene la ventaja de que los oyentes participan de forma inmediata por medio de preguntas, ya que las pausas del relator así lo permiten. Por otro lado, no necesariamente se sigue un orden o se detiene en detalles sin profundizar en lo importante.

Para otro docente, el relato se transformó en un recuento de actividades realizadas en la clase. Esta forma de escritura no se ajusta propiamente a la idea de relato, ya que se centra en acciones formales y deja en segundo plano o incluso ignora a la voz de los actores, sus emociones y vivencias.

Estos datos metodológicos son relevantes porque facilitan luego el proceso reflexivo. Desde este punto de vista, las historias permiten una re construcción del sentido de lo vivido transformándolo en una experiencia con un nuevo significado. Al mismo tiempo, hace posible la búsqueda del sentido religioso de lo vivido.

Las temáticas abordadas en los relatos eran muy diversas las unas de las otras. La situación de los migrantes en las escuelas de la comuna de Santiago es ocasión para observar nuevos desafíos para los docentes. El uso del lenguaje y el significado de las palabras son algunos elementos en la comunicación diaria en los cuales los profesores deben estar alertas.

En otro relato pudimos observar la capacidad de una estudiante de 8° básico para saber apreciar y discernir información de otras asignaturas que contrastan con el mensaje que recibe en la clase de Religión.

Finalmente, en otro relato pudimos ver la experiencia pedagógica satisfactoria de una docente con sus estudiantes.

En cada una de estas experiencias hemos podido apreciar una serie de acciones que realizan los profesores para responder a los desafíos que se les presentan. En una lectura religiosa de los relatos destacamos el valor de las mociones, es decir, los movimientos hacia los cuales se inclinan los protagonistas. Estos movimientos pueden conducir, por ejemplo a los docentes a formarse más para conocer la cultura de los niños migrantes. Siendo así, entonces, estas mociones se pueden leer religiosamente ya que Dios se sirve de ellas para producir un mejor servicio.